Casa de Isa Scanlo

-Traeme ropa de hacer deporte, y no mucho más, estaremos aquí todo el fin de semana, hay cosas que hacer y los ratos que no hagamos nada yo saldré a hacer deporte.
Mi madre marchó y yo me quedé allí plantado sujetando con una mano el transportín del bicho y en la otra la planta que me empezaba a producir urticaria. Entré en la casa y dejé salir al gato, se quedó como atontado allí parado mirándome, lo tomé en brazos y lo llevé hasta la cocina para dejar la planta y ponerle los cacharritos de la comida y agua.
-Vamos a llevarnos bien bicho, yo soy el amo y tú te portarás bien, sí, sé que me estás entendiendo, eres un bicho listo, así que mira, come y bebe, pero no te acerques a esa planta amarilla, hazme caso, te puede pasar algo malo, y a mí si meters tus uñas en ella.-lo dejé en el suelo y se puso a beber.- no te quitaré ojo por ahora bicho, llevémosnos bien, oye viéndote así, no pareces tan malo, eres gracioso.-dije cuando se puso a andar torpemente por la cocina llegando a mi pierna para olisquearme.-

Se me acumularon una serie de pensamientos mientras hablaba con el bicho, menos mal que no había nadie cerca para verme de esa guisa...podía con la situación, no era complicada, yo dormiría en nuestra cama y mi madre en la otra cama, ahroa tenía que buscar las sábanas que vete tu a saber d´nde estabana. cogí al bicho en brazos y subí a buscar en los armarios, las encontré en uno de los cajones y fui a hacer la cama donde dormiría mi madre, supongo que no le importaría dormir en la cama pequeña, es que se me haría raro que mi madre durmiera en nuestra cama después de todo...bajé y volví a coger al bicho, lo dejé en el piso de abajo que inspeccionara su nuevo hogar, me gustaba verlo, se le veía un poco acojonado, pero poco a poco iba tomando confianzas con la casa. Subí su cama arriba, en nuestro cuarto, y la caja de arena detrás de la puerta del baño, volví a bajar y ví que el gato estaba a los pies de la escalera meneando su cola esperándome.
-Ya estoy contigo bicho, ven vamos a ver que tenemos para comer.-fui andando a la cocina y el mierdecilla me seguía metiéndose entre mis piernas mientras caminaba yo.- veamos veamos...lo único que se me ocurre sin que me tenga que calentar la cabeza es cocer pasta y echarle un bote de salsa encima, tranquilo bicho, podré con el reto de cocinar.-reí al gato mientras me miraba sentado y me puse a hacer la comida.-

-Como si me fuera a librar de todas formas,- susurré pero mi madre se dió cuenta y me miró como diciento que qué decía, yo le respondi callando y descargando cajas.-
Las descargué todas, tampoco sabía donde quería que las pusiera, así que las fuí apilando a un lado del salon mientras ella estaba en la cocina rematando la faena y asegurándose de que el gato no había sufrido daños por mi parte. Me acerqué a la cocina a ver que se cocía allí nunca mejor dicho.
-Vale he acabado, tengo hambre mamá y deja al bicho que está perfectamente, ¿está gracioso eh? creo que se ha hecho mi amigo, me sigue por todas partes a donde voy...

Nos sentamos a la mesa para comer, ¡que recuerdos! me vino a la mente esa noche haciendo los deberes cuando Is apareció con su pijama...bestial. Terminamos de comer y recogí yo la mesa, me sorprendió que me madre me dejara hacerlo sin quitarme ella las cosas para hacerlo ella. Nos sentamos en el sofá, sí, también me vinieron demasiados recuerdos como no, y puse la tele, seguro que pondrían una de esas pelis de amores que a mi madre le gustaban y yo podría echarme una siesta. El bicho se me subió a la tripa, movió sus patitas encima de mi camiseta y se hizo un ovillo para dormirse encima. Mi madre miró la escena y se le escapó una risilla.
- No te rias tanto y explícame, no pensarías que iba a pasar tu comentario por alto de "os dará problemas".-reí.- tu subconsciente te traiciona...

-Blanco y en vasija leche fija.-reí mirando la cara de circustancia de mi madre.- pues claro que he dormido con ella en esa cama, no pensarás que nos quedamos a jugar al parchís.-seguía riendo.- claro que es especial para mí, sino no estaría aquí ni estaría de tan mal humor por que ella no está, además me gusta vivir aquí, no se oye un ruido y estás en contacto con la naturaleza ajeno a todo, oye que si quieres puedes dormir en nuestra cama, la otra es demasiado pequeña, igual estás incómoda.-dije pensativo.-

-¿Se nota mucho? viviría aquí el resto de mis días.-hice una pausa.- con ella por supuesto, aunque te echaría de menos mamá, siempre hemos estado tú y yo juntos ¿qué haría yo sin tí?.-empecé a reir.- tú eres la que me recuerda dónde tengo la mano derecha, hagamos algo va, que como te apalanques en el sofá luego no hay quien te mueva, ¿prefieres que empiece yo y tú reposas algo más?

-Hagamos lo siguiente, tú estás reposando ahí quietecita mientras yo voy sacando las cosas de la caja en la mesa y vas haciendote tu composición con las cosas que haya.-cogí las cajas y fui sacando su material encima de la mesa, mi madre iba mirando mientras pensaba sus cosas.- yo nunca te dejaré, allá donde vaya a vivir irás conmigo, además ayer mismo Is me echó la bronca por que hice un comentario en broma sobre irnos de aquí y me dijo que no iba a dejarte sola, para que veas que también te quiere y piensa en tí, no te librarás de mí tan facil.-reí mientras seguía desembalando cajas.-

-Mamá que somos jóvenes, además Is es aun más joven que yo, no agobies con eso que nos conocemos. Bueno qué, ves algo que te inspire ¿o seguimos de charlita nostálgica?.-si mi madre seguía hablando de Is me acabaría poniendo jodido del todo.-

Mi madre nunca dejaba de sorprenderme....
-Es verdad, parece que hay alguien en la puerta, quizá sea algun vecino que sabe que Is no está y al ver luz en la casa ha venido a ver que ocurre, quédate ahí, ya miro yo.
Me levanté y fui hacia la puerta...

(Is está mi madre no me metas mano ehhh)

(jo.... )

Habia luz en la casa, debia de ser Jim, se iba a llevar una sorpresa, cargue con la maleta, que pesaba bastante mas que cuando me habia ido y la arrastre hacia la puerta de la casa, me puse a buscar las llaves por el bolso, pero no conseguia encontrarlas, deje el bolso en el suelo y me agache a buscarlas, en ese momento se abrio la puerta, levante la mirada y vi a Jim, me levante tan rapido que casi me caigo y me colgue de su cuello hundiendo mi cara en su hombro...
-Sorpresa! - le dije separandome de el muy sonriente, se quedo con la boca abierta- puedes volver a respirar ya...- le dije riendo al ver que casi no se movia, di un paso atras agarre la maleta y le mire- no me vas a dar un beso?- le puse un pucherito

Le quité la maleta de la mano y me tiré a besarla como un loco, tenía la puerta abierta y mi madre nos estaría mirando pero a estas alturas me importaba bien poco, la había echado tanto de menos...si llega a tardar más no hubiera aguantado, estaba como loco besándola y tocándola mientras la sujetaba fuerte para que no se volviera a ir de mi lado. Cuando estábamos en lo mejor el bicho empezó a frotar su cuerpo en mi pie y me jodió la bienvenida, me aparté un poco de Is y cogí al bicho entre mis brazos.
-Mira bicho, esta es tu nueva dueña, más te vale portarte bien y olvidate de dormir con ella o te cogeré del pescuezo y te mandaré al medio del bosque, te tendré vigilado bicho.-dije mientras se lo ofrecía a Is para que lo cogiera.- Nena dios te quiero de más, no sabes lo que han sido estas horas sin tí, casi me muero, si casi ni he comido, uf uf no te vayas más prométemelo.-le dije suplicando.-

Mire al gatito que Jim tenia entre las manos, el me lo paso despues de amenazarle de unas cuantas tonterias, le enseñaria a ese gato a pasar de Jim... lo dejo caer en mis manos y el gatito me miro.
-Es mio?- le pregunte a Jim, el asintio con la cabeza mientras sonreia, antes de que pudiera hablar le dije- me encanta! Es, es casi azul! Es alucinante...- le di la vuelta al gato para mirar su sexo- es una gatito adorable... Hola Jimsy...- le dije poniendo la nariz del gato pegada a la mia, Jim me miraba con mala cara, tenia celos del gato...- si gordo... te prometo que no me voy ninguna vez mas, o al menos sin ti... tengo una gran noticia, pero mas tarde, dejanos entrar en nuestra casa a Jimsy y a mi.- le di un beso a Jim y volvi a mirar al gato.-Oh Jimsy, vamos a ser grandes amigos!- le dije al gato acariciandole.

Entramos en casa y ella seguía hablando con la bola de pelo, joder estaba apsando de mí, eso no podía ser, la necesitaba solo para mí, uf que mala idea traer ese bicho aquí, me estaba desplazando...
-Vale nena sí, deja al gato que se agobia, sep, es casi azul, me dijiste que era tu color preferido ¿no?.-le puse risilla de "¿ves como me acuerdo?".- no le puedes poner mi nombre a un bicho, no puedes hacerme eso, luego se reiran todos de mí, no sé ponle nombre de gato pero no el mío nena, hay que ver lo que disfrutas picándome...quiero saber qué sorpresa es, yo tengo varias para tí,-la miré un momento fijamente.- te veo más guapa que ayer.

Le di un beso al gato en la cabeza y lo solte, mire a Jim.
-El gato se llama Jimsy, tu te llamas Jim.- le afirme- no le voy a cambiar el nombre, no te quejes...- le tape la boca con una mano, y despues puse mis labios sobre los suyos.- Mas guapa?- le dije mirandome- no creo, he dormido poquisimo y e hecho un monton de cosas en un tiempo record, pero gracias!- le sonrei- mi sorpresa?- le dije, en ese momento entro Valerie al salon- Hola Valerie! No sabia que estabas aqui!- me acerque a abrazarla, se sorprendio porque habia llegado muy pronto- si, lo he hecho todo en un tiempo record!- le sonrei- aah! Y traigo unas cosas!- me acerque hacia la maleta y me puse a buscar la bosla con lo que les habia comprado.

Mierda mierda mierda, tenía que deshacerme de mi madre como fuera, yo necesitaba a Is para mí solo, ahroa se pondrían a hablar y encima el bicho por en medio, no me podía pasar eso a mí...se pusieron a hablar del viaje y mi pequeñaja a sacar cosas que había traido, mi madre parecía una niña con zapatos nuevos, en el fondo no estaba mal del todo, me gustaba estar así, todos juntos en casa, se las veía felices a las dos. Cogí al bicho y me lo puse otra vez en la tripa.
-Ya ves Jimsy, te han puesto nombre de tío interesante no te quejes.-estaba hablandole al gato directamente.- ¿verdad que tu dueña es guapa? además es una empollona, pero es bueno por que me deja copiar y eso, no te fies de ella, primero te engatusará y luego no tendrás más remedio que hacer lo que ella mande, pero cuidado, que la joya que hay con ella no se queda atrás, entre las dos nos volverán locos muchacho, mejor te quedas conmigo, pero no no, no me lamas la mano nooo.-puag ¿me estaba chupando un animal?ay madre, me hacía cosquillas.-

Me puse a hablar con Valerie mientras Jim le decia cosas al gato, en verdad, aunque el dijera que no, el gato le gustaba... Estaban tan monos los dos. Saque el regalo de Valerie, era un pequeña radio.
-Mira, me fije el otro dia que en la cocina no tenias entretenimiento, a mi me gusta cocinar con musica, y pense que tal vez te gustara, pero puedes gastarla donde quieras.- le dije a Valerie cuando abrio el paquete con la radio, era como esas de bolsilloo, pero con altaboces.
-Toma.- le di un paquetito a Jim y le quite el gato de encima- espero que te guste, la he echo casi toda yo... venga abrela.- le insisti mientras el miraba el paquetito.