Buscando la normalidad

- Iremos al medico, pediré cita para ir al medico si así te quedas mas contento, pero no me va a sacar nada, porque estoy sana.- le dije cuando me seco las lagrimas, me derrumbaba por momentos, necesitaba una buena excusa, iría a ver a Sam o a algún anciano del consejo para que me ayudaran a mentirle a Jim...Me sentía asquerosa, tener que buscar mentiras para convencer a Jim me mataba, sentía que nunca podría ser completamente sincera con el, y necesitaba serlo... Me abrace a el con fuerza, necesitaba saber si me quería de verdad, si eso era cierto, si de verdad me quería no podría ocultarle nada, en la manada comprenderían que necesitaba decírselo, y si no era así, ya me las ingeniaría para que supiera lo que era en realidad, de alguna forma lo haría...
-Te quiero - le susurre al oído de forma clara, me estaba jugando mi secreto a esas dos palabras

Nathaniel Miller

-Nathan.- se separo un poco de mi -escúchame, sabes lo que siento por tí, no me lo hagas mas difícil, no sabes lo mal que me lo haces pasar cuando estás conmigo y me ignoras, ya sé que tú no me miras como yo a tí, pero no me importa, tengo asumido que para tí sólo sere un rollo más en tu lista, pero me da igual, no vas a cambiar lo que siento por tí, te quiero Nathan.
- Vale - dije mirandola a los ojos - si quieres intentarlo se puede intentar.. pero yo no te prometo nada, acuerdate de lo que te dije en el hospital.- cogi su cabeza suavemente con mi manos y la di un pequeño beso - asi que ya sabes, no te pienses que vamos a ser algo asi como la pareja del año.

No sé si lo nuestro iba demasiado rápido, yo también la quería y mucho, pero me daba miedo todo esto, ella estaba esperando mi reacción y yo me quedé inmóvil, quería decirle que la quería pero no le había dicho eso a nadie, ella me hacía sentirme otra persona, me sentía bien con ella, no pensaba nada más que en ella...me estaba volviendo loco toda ella, no físicamente, como solía ser lo normal con las demás, sino su forma de ser ella y conmigo, me sentía un extraño, estaba confuso pero sabía que no quería perderla.
-Is.-ella levantó sus ojos hacia los míos.-esto...bueno que me alegro que me quieras de verdad pero...-ella se separó de mí con cara de asustada y a punto de volver a llorar de nuevo, no sabía que hacer, o me callaba y la perdía en ese momento o le decía claramente lo que sentía por ella.-
Pasaron unos segundos, quizá minutos, el caso que me quedé allí callado con Is dirigiéndome una mirada llena de furia y yo sin poder articular palabra viendo como se marchaba de mi lado.
-¡Espera Is! ¡Is!.-seguía andando con paso firme y ni se giró.- Te quiero Is, te quiero, me tienes loco cariño.-me ví gritando por el pasillo vacío haciendo eco mi voz en él.-

-Vale ,si quieres intentarlo se puede intentar.. pero yo no te prometo nada.-me dijo mirándome con sinceridad, un poco asustado por todo aquello diría yo.-, acuerdate de lo que te dije en el hospital,asi que ya sabes, no te pienses que vamos a ser algo asi como la pareja del año.-dijo dándome un beso y riéndose, supongo que pensaría en Isa y en Jim, no sé que les veía de malo, a mi me encantaba todo aquello....-
-Recuerda entonces que te dije que no me juzgaras sin conocerme.-conforme dije esas palabras sabría que Nathan me haría sufrir, pero merecía la pena.- pero ya sabes lo que pasa cuando me dejas sola, me da por volverme mala.-le puse cara de mala de las películas y el se rió.-anda cariño, intentemos pasarlo bien, mira Isa me invitó antes a una playa que hay en la reserva, ¿por qué no vienes con nosotros? estaremos lejos de todo esto y te vendrá bien despejarte de todo lo que te ha pasado, anda, no me puedes decir que no...-le hice unos pucheritos para convercerlo, me apetecía que lo pasara bien.-

Nathaniel Miller

- Bueno, vale - conteste refiriendome a lo de la playa, solo habia ido a la playa de la Push un par de veces y siempre me lo habia pasado bien - pero no podre bañarme - dije apoyando mi mano en mi pecho - aunque creo que tu tampoco lo haras, no sabes lo fria que esta ese agua, no aguantaras ni un minuto - dije riendome.

-Is.-levante la mirada hacia la suya- esto...bueno que me alegro que me quieras de verdad pero...- ¿"pero"? me separe de Jim un poco asustada, estaba volviendo a hacer el ridículo, me quede esperando a que supiera arreglar la situación, pero paso demasiado tiempo y el seguía callado mirándome, le mire un poco enfadada, pero no estaba enfadada con el, el habia dicho claramente como era, estaba enfadada conmigo misma, porque una parte de mi deseaba que dijera eso, una parte de mi estaba ansiosa porque la cagara y verle marchar, para no tener que preocuparme por que mentira le diría mañana...
"A si no tendré que preocuparme por lo que piense el cabeza de chorlito este de mi" me dije a mi misma, me di la vuelta y comencé a caminar por el largo pasillo, ahora iría al instituto de la reserva.
Pero le quería tanto... ya me había acostumbrado a su presencia...a su chulería...a el...
-¡Espera Is! ¡Is!-dijo gritando por el pasillo, no me gire, seguí andando, ya la había cagado, "no lo soluciones Jim, así no destrozare ningún hogar mas, no lo digas ahora, no lo hagas" suplique en mi interior- Te quiero Is, te quiero, me tienes loco cariño- "NO!" lo había dicho, sentí un alivio enorme por dentro, no habíamos estado jugando, el se había arriesgado a decirlo, yo sabia que le costaba y encima lo había gritado en medio de un pasillo, pero ahora? Ahora tendría que decirle mi secreto... ya estaba arrepintiéndome...me apoye en la pared y deje caer mi cuerpo hasta sentarme en el suelo, apoye mi cabeza contra las baldosas de la pared y suspire cerrando los ojos.

-Qué graciosillo eh, pues para que lo sepas pienso estrenar algun bikini de los que me traje, así que me bañaré, ya lo creo que lo haré.- parecía que le habían contado un chiste, no paraba de reir.-mejor que no puedas bañarte, así cuidarás de mi bolsa de playa, aunque.-dije poniendome muy seria.-¿tú sabías que el agua no encoge? pero nada de nada encoge.-empecé a reir.-eres un guarro cielo, ¿qué pasa, en tu casa tampoco te duchas por la herida?

-Díme algo, no que quedes ahí sentada que te va a picar un bicho en el culo.-dije para hacerla reir.-vale, reaccioné tarde, no soy así Is, en mi vida pensé que vendría una chica salvaje y alocada y me cambiaría por completo nada más conocerla, ¿que esperabas?ya te conté algo de mí, sabes lo que son las chicas para mí, y lo que tú eras en el momento que nos conocimos, pero conforme te fui conociendo me dí cuenta que te quería de verdad, pero me da miedo que no sientas lo mismo, que sólo sea un capricho para tí y vuelvas a tu reserva con tu vida y tus amigos.-me puse junto a ella y le acaricié la cabeza.-mierda, como le cuentes a alguien algo de todo esto...¡te comeré como un lobo feroz! venga levanta de ahí ya por favor, te dejo que me pegues si eso te hace feliz.-me agaché y le robé un beso, estaba sin decirme nada todo el rato, parecía que estaba abducida en su mundo de nuevo.-

Nathaniel Miller

- Pues sera mejor que ese bikini que dices que te vas a poner te cubra todo el cuerpo porque sino te vas a morir de frio, en serio - dije riendome - ademas, vas a dejarme sentado en la arena solito? - puse un puchero - y que sepas que me ducho todos lo dias, pero una cosa es el agua de la ducha calentita y otra el agua de mar fria como el hielo, asi que de guarro nada. Veras lo que me voy a reir en cuanto te salpique un poquito de agua.

-Quizá tengas razón...este sitio es tan frío que como la playa sea igual...Is, mi nueva amiga, me ha dicho que está bastante bien...-dije pensativa.-no pienso ponerme un traje de baño que me cubra entera, ¿estás insinuando que no te gusto?.-me puse seria, pero se me escapaba la risa.-anda tonto como voy a dejarte solo si pones esa carilla, me quedaré contigo, podremos hacer alguna cosa, quizá jugar con unas raquetas o a voley, ya veremos...no te enfades por llamarte guarro, me encanta como hueles galletita.-dije arrimándome a él y oliendo su pelo.-

Nathaniel Miller

- ¿Como no me vas a gustar empanadillita? - dije recordando cuando su padre la llamo asi en el hospital e intentando contener la risa - pero has dicho que va a ir ese tal Jim, y aunque tenga novia no quiero que te mire mucho, por si te desgasta. - le di un beso en la oreja - yo estoy muy debil para esa clase de ejercicio fisico - dije refiriendome a jugar a voley o palas, con el voley no tenia ningun problema pero era realmente malo jugando a las palas.

-¿Celoso? tranquilo por Jim sólo tiene ojos para su chica, creéme.-suspiré recordando la suerte de mi amiga.-¡pues a mi me encanta jugar con las raquetas! por esta vez de lo dejo psar que sé que estás flojito, pero díme entonces díme para que clase de ejercicio estás bien, lo digo para pensar en alguno que podamos hacer...-le eché una mirada pícara.-

Nathaniel Miller

- Eso espero - murmure acerca de lo de Jim - eeh eeh tss - dije poniendole la mano en la frente y apartandola de mi - eres muy pequeña para pensar en esa clase de cosas no crees? - dije burlandome de ella, sabia perfectamente en lo que estaba pensado, su mirada me lo habia dicho todo - no no - dije negando con la cabeza - .. que dirian tus padres? eeh!? - y sin poder contener la risa me eche a reir.

-Eso es que no me has visto en acción.-saqué mis gafas de sol de la chaqueta y me las puse para vacilarle.-sólo me sacarás..un par de años quizá, aunque estás tan castigado que parece que tienes 30.-empecé a reir por la cara de circustancia que puso, en realidad no sabíamos las edades que teníamos, pero por lo menos a mí me daba igual.- y tranquilo, mis padres toman pastillas para dormir, caen fritos, así que no se enteran de lo que hace su hijita querida por las noches.-me levanté las gafas un poco para guiñarle un ojo con descaro, y me las volví a poner, me estaba divirtiendo mucho.-

Nathaniel Miller

La observe con esas gafas, estaba realmente graciosa.
- Asi que me conservo mal no? - dije dandome la vuelta y rebuscando en un armario hasta que encontre su matricula de inscripcion - Audrey Owen, 18 años, quien lo diria - dije poniendo el documento sobre el mostrador para que pudiera verlo y me cruce de brazos - yo te echaba un par de años menos, ni la mentalidad ni la altura de acompañan eeh! menos mal que eres como el vino, que con los años mejora - dije riendome con ganas y señale con el dedo la foto que aparecia - sales bastante mona, cuantos años tenias en la foto? - era la tipica foto de carnet de identidad en la que pocas veces se sale favorecido y ella no salia muy bien que se diga, la mire a la cara, estaba roja de verguenza. - es importante saber que tus padres duermen como troncos, quizas algun dia tenga que colarme por tu ventana para seguir viendo fotos - y le guiñe un ojo sonriendo y riendo suavemente.

-Te odio Nathaniel Miller.-dije intentando parecer furiosa.-ese expediente es confidencial, ¿no querrás meterte en lios no?.- lo cogió rápidamente y lo guardo en el armario de nuevo.- para tu información en esa estúpida foto estaba con fiebre, por eso salgo mal, así que olvida que has visto eso.-hice una pausa y me puse a arreglarme un poco el pelo, debería llevarlo fatal y no tenía espejo para verme, que horror.-por cierto, en mi cuarto hay cosas más interesantes que enseñarte, ¿para que quieres ver fotos mías si me tienes delante? creo que tengo cosas que te gustarán más, pero no sé, eres demasiado mayor, aunque quizá ahora que sabes mi edad, no te de tanto miedo colarte en ella, tu sabrás que haces pequeño.-intenté hacerme la chulita, pero se me daba realmente mal, debería ir practicando poco a poco.-

Nathaniel Miller

- Ya claro.. todo el mundo tiene fiebre cuando se hace este tipo de fotos - dije para seguir picandola un poco - si, en tu cuarto debe de haber cosas mas interesantes - sali de detras del mostrador y cogi una de sus manos y la atraje hacia mi, pasando mi brazo libre por su cintura para acercarla mas - ¿y como es eso de que soy demasiado mayor? piensa que cuanto mas mayor mejor experiencia - acerque mi cara a la suya rozando mis labios pero sin llegar a besarla - haces muy mal el papel de chulita Audrey, eso va mas conmigo que contigo - y empece a besarla despacio, atrayendola hacia mi todo lo que podia.

Jo me encantaba cuando se comportaba así conmigo, quizá ahora que sabía que era mayor de edad se le quitara un poco el miedo, sí, ¡que tonta! cómo no caí en la cuenta antes, Nathan pensaría que tendría 16 años o así, por eso quizá me rehuía a veces.
-Despacio fiera, no querrás que nuestra amiga la bruja aparezca y nos vea así, ¿no?.-no quería parar, pero me daba cosa por Nathan que la maldita vieja nos pillara de nuevo, él necesitaba ese estúpido trabajo y no quería ponerlo en peligro.-
Le dí un último beso y me separé de él, ojala pudiera parar el tiempo y quedarme con él así para siempre, pero teníamos obligaciones los dos, y quien sabe si coincidiriamos en alguna clase, me animó bastante este último pensamiento, si no era con él, que fuera con Isa, lo que sabía es que no quería andar sola, había observado algunos alumnos de lo más rarito.
-Por cierto señor experimentado,-me reí, mientras le daba la espalda.- posiblemente te sorprendas de la de cosas nuevas que te puedo enseñar...-dejé volar su imaginación, me volví y le dije.-dejo la ventana de mi cuarto siempre abierta.-Nathan sonrió e hizo un movimiento con las cejas bastante sexy por cierto.-ya sabes, por si te apetece ver fotos o lo que te apetezca.-me acerqué a donde lo dejé y le dí un besito al lado de su boca.-esto para que te sea leve el rato que te queda aquí cariño.-le dije acariciando su cara con mis manos.-

Al final tendría que darle la razón a las chicas, la secretaria parecía que las odiaba por algo, vaya manera de dirigirse a Is, aunque conmigo fue todo lo contrario, no me gusto ese comportamiento con mi chica.
-Señora disculpe, sólo estabamos esperando que apareciese usted para que le diera los libros a mi chica, siento que se tome tan a pecho vernos así, no molestamos a nadie, espero que se acostumbre a nosotros por qué voy a pasarme el curso junto a ella, le guste a usted o no.-estaba bastante molesto con la actitud de la vieja.-además hace años que nadie me dice que tengo que hacer, sé perfectamente que están a punto de comenzar las clases, gracias por preocuparse tanto, ahora si nos disculpa.-eché el brazo por el hombro de Is y nos dirigimos dentro de secretaría, allí estaba aun la rubia que se la veía de lo más contenta y el chaval que parecía algo tenso.-
-Is, tienes razón, esa vieja es una bruja.-le dije en flojo para que no nos oyera la mujer.-te acompaño a por tus cosas y vamos para clase que va siendo hora.

Jim me paso un brazo por el hombro y me guío hacia la secretaria de nuevo, íbamos delante de la mujer, menos mal, así podríamos avisar a Audrey...
-Is, tienes razón, esa vieja es una bruja.-me susurro bajito poniendo mala cara-te acompaño a por tus cosas y vamos para clase que va siendo hora.-
-Te lo dije, pero no me hiciste caso...esa mujer me odia!- le conteste yo, pero sin bajar nada el tono de mi voz, me importaba una mierda lo que pensara la vieja de mi. Cuando entramos Audrey me sonrío y me guiño un ojo, supuse que todo había ido genial, saque sus libros de mi bolso y se los tendí
-Toma preciosa, por fin tienes tus libros, y por fin yo, voy a tener los míos*- le dije a Audrey riendo, me apoye en el mostrador- Bueno, señora, déme mis libros y déjeme salir de este lugar- puse una cara de asco, mire a Jim y añadí- por favor! - me gire a mirarle de nuevo y le guiñe un ojo, estaba intentando portarme bien



* Despues de 2 meses de espera!!

-Nos vemos en clase Nathan, llega gente.-dije a modo de despedida.-no te metas en líos sin mí ¿vale?.-le guiñé un ojo y me dirigí a la puerta.
Se abrió la puerta y apareció Isa con su inseparable Jim y dentrás de ellos el ama del calabozo, buaj estaba deseando salir de allí para perderla de vista.Me alegré de verla, en este ratito separadas ya tenía novedades para contarle, creo que me lo notó en la cara por su gesto cómplice.
-Toma preciosa, por fin tienes tus libros, y por fin yo, voy a tener los míos*- me entregó los libros que llevaba en la mano y se dirigió al mostrador a recoger los suyos decidida.- Bueno, señora, déme mis libros y déjeme salir de este lugar por favor! - a su chico no parecía gustarle ese comportamiento, ella se dió cuenta e itnentó arreglarlo con unas sonrisitas y guiños con él, el chico pareció aceptarlos de buen agrado.-
-Gracias Isa, espero si no os importa para ir a clase juntos, soy capaz de perderme buscando el aula..-esperé en la puerta a que le dieran los libros y por fin poder ir a clase.-

Matemáticas? Fantástico!!
-Exactamente igual que una patada en el estomago, exactamente igual...- dije con resignación, coloque todos mis libros nuevos dentro del bolso a la vez que sacaba la gorra y me la colocaba en la cabeza, me gire hacia mis compañeros y les dije
-Nos vemos mañana!- abrí la puerta de la secretaria, me iba a casa. Comencé a caminar por el pasillo en dirección a la salida, oí a Audrey reírse y llamarme exagerada, y antes de haber dado 5 pasos unos brazos me sujetaron, era Jim.