Casa de Isa Scanlo

Su cara estaba pegada a mi cara, la separó un poco para hablarme
- Tengo curiosidad por saber que hace un delincuente con una policía, supongo que ahora me esposaras o simplemente te desharás de mi no?.-le dí la vuelta y pegué su cuerpo frente al mío, subí los brazos por su espalda sin soltarla, la tenía agarrada con fuerza para que no se moviera, cogí su cabeza con mis manos y la empujé hacia mí, besé la comisura de sus labios, cogí su labio superior entre los mios y tiré con suavidad un poco, noté como se estaba derritiendo por momentos,tenía muchas ganas de ella, fuí besando su cara despacio hasta llegar al lóbulo de su oreja, lo introduje en mi boca y luego pasé la lengua por él, paré un momento y le susurré:
-¿Deshacerme de ti? eso ni lo sueñes.-volví a besarle la oreja mientras bajaba mis manos hasta el final de su espalda.-creo que contigo no harán falta esposas por que te vas a portar bien, ¿verdad?.-le dije mientras la apretaba con mis manos.-¿quieres que te quite la incertidumbre de saber que te va a pasar ahora que estas en mis manos?

Cuando me quise dar cuenta estaba pegada a su cuerpo y el había subido sus manos hasta mi cara, me beso la comisura de los labios y cogio mi labio superior entre los suyos tirando de el… me derretía, estaba completamente mareada, no sabia día, hora, no sabia ni como me llamaba, entonces paso su lengua por el lóbulo de mi oreja y parándose me susurro
-¿Deshacerme de ti? eso ni lo sueñes.-volvió a besarme la oreja mientras bajaba sus manos hasta mi culo.-creo que contigo no harán falta esposas por que te vas a portar bien, ¿verdad?-me dijo apretándome mas contra el-¿quieres que te quite la incertidumbre de saber que te va a pasar ahora que estas e mis manos?-
"dios, claro que quiero" me decía a mi misma una y otra vez, pero no iba a ser débil, la situación era cosa mía.
Moví uno de mis brazos rápidamente hasta su nuca para acercar su cara a la mía y besarle, tenia que despistarle, baje la otra mano hasta el bolsillo de su pantalón y la metí dentro sacando después las llaves de su casa sin que se diera cuenta.
Separe mis labios de los suyos y sonriendo pícaramente puse las llaves de su casa en mi escote, el bajo su mirada hacia allí pero le coji la cabeza con ambas manos y la subí
-Aquí-dije señalando mis ojos- , ahora tu también eres un poco rehén mío...-le sonreí y dije- me muero de ganas por saber que me va a pasar en tus manos, pero recuerda que soy una agente de la ley...-le dije esto ultimo mientras paseaba mis manos por su pecho apretándolas con fuerza para sentir sus abdominales

Noté su mano por mi pantalón, me gustaba sentirla, me llevaba poniendo toda la tarde y había llegado el momento de soltarme con ella.sacó su mano con suavidad y puso las llaves de casa en su escote, puf esta chica quería acabar conmigo.
-Aquí-me dijo señalandome sus enormes ojos negros- , ahora tu también eres un poco rehén mío... me muero de ganas por saber que me va a pasar en tus manos, pero recuerda que soy una agente de la ley...-me dijo mientras me acariciaba el pecho.-
La traje de nuevo junto a mí y empecé a besar de una manera bestial su cuello,le daba pequeños mordiscos a la vez y poco a poco fui bajando a su pecho sin dejar de besarla, la impulsé hacia arriba con mis manos de tal manera que su pecho quedó justo enfrente de mi cara y ella entrelazó sus piernas alrededor de mi cintura, ahora que tenía su maravilloso escote frente a mí, hundí mi cara en él y cogí cuidadosamente las llaves con los dientes.Subí la cabeza para mirarla y ella comenzó a reir de ver aquella escena

Comenzó a besarme de una forma que me dejaba sin aliento, además de que me mordía de vez en cuando el cuello, vi su intención de subirme así que se lo puse fácil y entrelace mis piernas entorno a su cintura posando mis manos en sus hombros y mirando lo que hacia, metió su cabeza en mi escote y la saco con la llaves en la boca, estaba riéndome de lo lindo con aquello y no quería que se saliese con la suya así que acerque mi cara a la suya e intente coger las llaves con mi boca, el las tenia cogidas de un lado y yo de otro y así forcejeamos un rato hasta que se cayeron al suelo
-vaya...que lastima, se han caido...- le dije con un gesto indiferente- sin llaves no te puedes ir de mi casa...-acerque mi cara a la suya haciendo intención de besarle quedandome asi parada varios segundos, pero no lo hice, aunque me moría de ganas de besarle, quería jugar, así que le di un pequeño beso en la mejilla y apoye mi cabeza en su hombro cerrando los ojos y abrazándole con mis brazos como si fuera a dormir y el fuera mi osito. Se quedo como muy parado y sorpendido y yo me reí por lo bajito aunque el debió de oírme pues su oído quedaba muy cerca de mi cara.
-No tienes sueño Jim?-le pregunte inocentemente mientras le mordía el cuello con fuerza para dejarle una pequeña marca.

Is se bajó de mí exhausta y se acostó a mi lado, me giré para mirarla, se la veía tan frágil en aquel momento que cogí la sábana y tapé su cuerpo, no quería que se enfriara, ella me devolvió el gesto con una sonrisa, no podía articular palabra después de todo aquello.Me acerqué a ella y le besé la frente, dejé mis labios unos segundos pegados a ella.
-Has estado fantástica nena, ¿te ha gustado tanto como a mí?a pesar por tu estado, yo diría que estas satisfecha ¿no?.-le dije bromeando.-
Me quedé esperando su respuesta mirándola, dios mío, era tan perfecta, era una chica única y quería conocer todo sobre ella.
-Is, esto sediento, voy a bajar a beber algo, ¿quieres que te suba alguna cosa?.-no quería que se moviera de la cama, quería que descansara como una reina, me apetecía cuidar de ella.-

Jim me tapo con la sabana y beso mi frente, me sentía tan bien allí que cuando me dijo que iba a beber me removí enfadada por que se iba.
-Is, estoy sediento, voy a bajar a beber algo, ¿quieres que te suba alguna cosa?-me dijo en tono cariñoso, asentí con la cabeza y me puse pensativa
-Galletas...-le dije sonriendo- galletas y zumo, mmm, zumo...-dije haciendo una mueca con la cara y Jim se río, a continuación salio de la habitación y le oí bajar a bajo y abrir la nevera y algún armario. Me incorpore a la cama, sentándome en ella y apoyando mi espalda a la cabecera de la cama, observe la habitación con detenimiento, había ropa tirada por el suelo, tanto de Jim como mía, mis zapatos, su cinturón, y estaban las maletas a medio deshacer allí a un lado, reí por el desastre y automáticamente me acorde de Nick, siempre tan ordenado...gire mi cara y cogi el marco que descansaba sobre mi mesita, en el estaba la foto de Nick y mía antes de la excusión del curso pasado, la pena me abordo por completo, pero intente recomponerme lo mejor que pude cuando note girar el pomo de la puerta.

Esta chica no paraba de sorprenderme, tenía unos cambios de personalidad de los más gracioso, hacía unos minutos estaba sobre mí hecha una fiera, y ahora parecía una niñita mimosina.
-Galletas...-me dijo con su carilla de buena- galletas y zumo, mmm, zumo...
-Está bien preciosa, pero no te muevas de ahí ¿me oyes?.-le dije advirtiéndola con el dedo.-
Bajé las escaleras a todo correr, no conocía bien la casa así que esperaba encontrar fácilmente su encargo, me dirigí a la nevera, saqué el brick de la leche y bebí directamente de él, acabando con su existencia, estaba sediento, a continuación saqué un zumo de piña, no sabría si preferiría ese, pero lo elegí a mi gusto, estuve buscando por todos los armarios de su minúscula cocina hasta que dí con un bote que parecía contener galletas.Efectivamente, el bote estaba medio vacío, esperaba que tuviera suficiente con eso, pero por si acaso, cogí un paquete de brownies que estaba al lado.
Subí cargando con su encargo y al abrir la puerta me la encontré apoyada en el respaldo de la cama, con un portafotos en sus manos, semblante serio y se secaba lo que parecía ser una lágrima.
-¿Cariño te pasa algo? vamos puedes contarme lo que sea de veras.-dije mientras me sentaba en la cama junto a ella dejando las cosas sobre la mesita.-a ver, déjame ver esa foto.-se la quité de entre las manos y en ella aparecía Is con un chico que le agarraba la cintura y se les veía bastante felices de estar juntos.-
-Vaya, ¿este es tu novio? ¿tanto lo quieres que estás aquí conmigo y tienes que ver vuestra foto para acordarte de él?.-se lo dije bastante molesto, no pensaba que Is tuviera novio, ni que pensará en él estando conmigo, así que me levanté de la cama y me puse a coger mis ropas esparcidas de su cuarto sin ni siquiera mirarla.-

Se levanto hecho una furia de la cama y comenzó a recoger su ropa de la habitación, al principio me quede muy parada, no podía entender como estaba diciéndome aquello, por quien me tomaba? Pero en ese momento caí, apenas nos conocíamos, y lo había metido en mi casa y mi cama, era un estupida...
Mi cuerpo comenzó a temblar levemente con todo aquello, me levante de la cama enrollándome en la sabana, tirando todo por el suelo
-Esta muerto- dije despacio intentando por todos los medios calmarme como fuera- se fue al bosque y le ataco un animal, por eso no deje que te fueras, si te vas y te pasa algo nunca me lo perdonare...-cuando dije esto me senté en el suelo y envolví mis rodillas con mis brazos
-Era mi única familia, mi mejor amigo, vino a este puto pueblo de mierda porque yo se lo pedí y lo único que he conseguido a sido que se lo comiera un animal-dije gritando contra mis piernas. Vi su móvil en el suelo, lo cogi y se lo lance mientras le decía
-Estoy acostumbrada a estar sola...todo el mundo se va, mi madre, mi padre, mi hermana, Nick, Alex, tu...-respire hondo, me tumbe en la cama dispuesta a llorar toda la noche en cuanto el saliera por la puerta, aunque ya resbalaban las lagrimas por mis mejillas - siento mucho que hayas perdido tu tiempo conmigo- dije en un susurro sin ni siquiera mirarle.

Comenzó a hablarme cuando estaba hecho una furia, me paré cuando me contó lo de la muerte de su amigo, había sido un estúpido, debí haberle preguntado antes de portarme como un imbécil, ella me lo contó durante la cena y lo había pasado por alto, no estaba actuando bien, ella en cambio arriesgó mucho metiéndome en su casa para intentar que no corriera la misma suerte que su amigo en el bosque y yo sólo pensaba que lo hacía para llevarme a la cama.Me lanzó mi móvil con ira, menos mal que tengo buenos reflejos porque lo tiró a matar.

-Estoy acostumbrada a estar sola...todo el mundo se va, mi madre, mi padre, mi hermana, Nick, Alex, tu...-dijo mientras la miraba desde la puerta - siento mucho que hayas perdido tu tiempo conmigo- me dijo llorando mientras se tumbaba en la cama.-
Tiré el móvil al suelo y dejé a medio abrocharme el cinto y corrí junto a ella, no podía dejarla así.
-Perdoname Is, he sido un completo imbécil, debí preguntarte antes de ponerme así.-le decía acariciando su melena chocolate.-me ha encantado pasar la tarde contigo Is, y no sólo por todo esto.-dije señalando nuestros cuerpos.-quiero conocerte de verdad, ¿ves? esto no habría pasado de habernos conocido antes, pero fue por culpa de mis instintos, me has puesto mucho con tu jueguecito y sé que tu también estabas gozádola.-dije mientras apartaba el pelo de su cara y le secaba sus lágrimas.-¡vamos mírame de una vez! me siento como un mierda, me estoy portando contigo mal, no quiero hacerte más daño de verdad, me gustas demasiado para dañarte, soy un egocéntrico sí, lo reconozco, son siempre las mujeres las que van detrás de mí, es la primera vez que siento esto por alguien, jamás pensaría que una chica pudiera llenarme tanto como tú lo haces Is, te diré algo, pero no te rías de mí por favor, esto nunca se lo he dicho a nadie, creéme.-tomé aire, cogí su cara y la miré fijamente.-Is me estoy enamorado de tí hasta la médula, me quedaré aquí contigo hasta que te canses de tenerme para tí preciosa.
La besé con mucho amor, esta vez no buscaba nada más en ella, sólo quería demostrarle que para mí era algo más que un par de polvos.Me levanté y me dispuse a buscar mi camiseta que creo recordar que estaba en el baño...

Seguía llorando mientras Jim me hablaba, si, se había arrepentido y yo le perdonaba pero ahora me dolía todo el cuerpo, había sacado de mi mente todos los recuerdos malos que llevaba guardando años, me habían pasado tantas cosas en el ultimo mes, y me veía incapaz de llevarlo todo a la vez, solo tenia 17 años, era prácticamente una niña, y estaba sola, encima no podía contárselo a nadie…
Me dijo que se estaba enamorando de mi, y me beso, con mucha ternura, a continuación salio de la habitación, quería ir tras de el, decirle que se quedara, que me abrazara que yo sentía lo mismo, pero tenia miedo, miedo de que esto fuera cada día mas grande y después se marchara como habían hecho todos los demás…volviéndome a dejar sola.
Me tape la cabeza con la almohada, y seguí llorando un buen rato, supe que no se había ido, pues le había oído bajar pero no abrir la puerta, así que supuse que estaría en el salón, tampoco enchufo la tele…
Me levante de la cama y me puse un pijama rosa de ositos que tenia, era un buen recuerdo de mi madre, ella me lo había comprado. Baje las escaleras sigilosamente y vi que Jim estaba sentado en el sofá mirando la puerta, me senté a su lado y apoye mi cabeza en su pecho resguardándome de todo allí, como si allí estuviera a salvo de todo lo malo… seguía llorando, intentaba parar pero no podía…entre lagrimas le pregunte
-¿Has venido a vivir a Forks con tu padres por el trabajo de tu madre o por el de tu padre?-

La dejé en la cama, creí que sería lo mejor, dejarla aclararse y desahogarse, necesitaba intimidad, así que fui al baño y recogí mi camiseta, vaya recuerdos me traía, se me escapó una risa, pero que coño me pasaba, acababa de hacer algo inimaginable en mí, mostrarle mis sentimientos a Is, no podía llenar mi cabeza con estupideces de crio.
Salí de allí y bajé las escaleras muy despacio, pues no quería molestarla, no pensaba irme de su casa, así que decidí pasar la noche en su sofá, no parecia tan incómodo después de todo, y había dormido en sitios peores.
No tenía sueño, así que pensé encender el televisor, pero tampoco quería que ella supiese que aun seguía aquí, así que me acomodé un poco en él buscando una postura más cómoda. De repente apareció junto a mí, se sentó a mi lado llorando como una magdalena y con un pijamita de lo más curioso, pero me gustaba, todo lo de ella me encantaba en verdad.
-¿Has venido a vivir a Forks con tu padres por el trabajo de tu madre o por el de tu padre?-me dijo entre sollozos pero intentando sonreir.
-Jajajaja primero deja que te limpie esas lágrimas anda osita.-le dije mientras señalaba con mi miraba su pijama de osos rosa.- mmm estoy aquí por mi madre, la han transladado a este pueblo, siempre hemos vivido en Massachusetts, ya te dije que era carne de ciudad, y respecto a mi padre....-dije mirando al techo.-yo no tengo padre Is, abandonó a mi madre cuando quedó embarazada de mí y nunca más supimos de él, pero no he tenido necesidad de tener un padre cerca, mi madre es maravillosa, ¿sabes? me recuerda algo a tí, también tiene mucho carácter, te gustará conocerla, haréis buenas migas.-dije volviendo a mirarla a la cara y acariciando su mejilla.-así mi madre tendrá la cómplice perfecta para meterse conmigo, ¡le encanta!.-estuve unos segundos en silencio para admirarla, parecía que se iba tranquilizando por fin.-

Sonreí mientras hablaba de su madre, lo hacia con un tono de total adoración, tanto que le brillaban hasta los ojos cuando la nombraba, y yo le miraba embobada tanto que consiguió que me calmara solo con decirme aquello.
-Seguro que tu madre es genial, si te ha criado a ti ella sola tiene que ser tan maravillosa como la pintas-le dije mientras apoyaba mi cabeza en su hombro
-¿Sabes? mi padre también se fue, aunque al contrario que al tuyo, al mío no le culpo, bueno…no del todo, siempre he querido pensar que lo hizo para protegernos a mi hermana y a mi. Supongo que debió ser duro para el marcharse cuando acababan de matar a su esposa dejando solas a sus dos hijas de 18 y 12 años-
Subí mis piernas encima del sofá acurrucándome allí, la luz estaba apagada y casi no se veía nada solo podía distinguir el cuerpo y la cara de Jim y porque estaba muy cerca de mi.

Me lavanté a encender una lamparita que había junto al sofá y volví rápidamente junto a Is, quería saberlo todo de ella, no sabía ni que hora era, pero para mí el tiempo se detenía cuando estaba con ella.
Me contó lo de su familia demasiado de puntillas, no me era suficiente, quería saber más y más.
-¿ves? tenemos algo en comun casi.-le dije mientras levantaba con mi mano su barbilla.-pero díme, ¿os dejo solas a unas crías de 12 y 18 años sin más y tú me estás diciendo que le comprendes? perdona si me meto donde no me llaman, pero eso no es de ser un gran padre que digamos, yo en tu lugar estaría furioso, os podría haber pasado cualquier cosa, supongo que tu hermana acabó en la cárcel por no haber tenido a ningun adulto que la supiera llevar, como es normal. Joder.-dije cabreado conmigo mismo.-no soporto ese tipo de tíos, que lo dejan todo cuando se agobian y marchan a hacer su vida sin pensar nada más que en su bienestar.

Le sonreí débilmente y cogi su mano para entrelazarla con la mía
-Esto que te voy a contar solo lo sabe Nick- me quede callada un momento- bueno, lo sabia Nick, el chico de la foto- dije temerosamente- pero siento que tengo que contártelo, quiero contártelo...-
Me miro asintiendo levemente y yo comencé a contarle la historia, o por lo menos la parte que yo sabia de ella
-Nací aquí, en la reserva de la Push, yo no lo sabia hasta hace poco, pero viví mi primer año de vida en esta casa, he vivido en muchas casas gracias al trabajo de mis padres- llene mis pulmones de aire - eran ladrones, pero de los buenos, nada de carteristas, solo cosas grandes...por eso te dije que se me daba mejor hacer de delincuente que de policia. Mis padres salieron un día a un atraco, no se con certeza que es lo que pensaban atracar, pero hubo un tiroteo, y mi madre murió en el...ya no volvimos a ver a mi padre...Como mi hermana era mayor de edad mi custodia quedo a su nombre y vivimos así tres años en nuestra casa, pero un día mi hermana tuvo la brillante idea de robar un coche, un porche creo...y la pillaron, mi custodia para mi primo Anton, estuve dos años en su casa, en su asquerosa casa...-dije con repugnancia- hasta que Nick y yo encontramos una postal de Forks, y le convencí para venir aquí, cuando me desperté el ya no estaba, y no he vuelto a verle...la policía no ha encontrado su cuerpo…-

Me quedé con los ojos como platos después de escuchar atentamente su relato, lo soltó tan rápido que apenas tuve tiempo de asimilarlo, el silencio se adueñó de toda la habitación por unos instantes, élla esperaba que yo dijera algo, pero exactamente no sabía qué era lo más adecuado.
-Vaya, pensaba que era una broma tuya lo de delincuente.-entrecomillé la palabra con la mano que tenía libre.-no tenía ni idea que tuvieras una vida tan díficil, siento que hayas tenido que vivir todo eso sola, ojalá te hubiera conocido hace años, te habría hecho pasar los malos momentos más fáciles creéme.-agaché mi mirada, me daba verguenza aun mostrar mis sentimientos.-te prometo que voy a cuidar de tí como te mereces, olvida lo q hiciste ayer, te aseguro que tu vida va a cambiar, me voy a hacer cargo de que seas feliz y consigas lo que te propongas osita.-dije un poco bromeando, no quería ponerme tan serio.- y olvida mi estúpido compotamiento de tu cuarto, me dieron celos de verte con la foto de ese chico.-me levanté, no quería que me viera la cara cuando salieron esas palabras de mi boca.-lo reconozco, soy muy posesivo, pero tengo muchos defectos aunque no lo creas.-como era normal, ella como todas me vería como un hombre perfecto, pero la realidad era bastante contraria.-

Se levanto un poco avergonzado por lo que acababa de decir, y yo me levante tras el
-pues claro que tienes defectos- le dije acariciando su cara- eres un chulo, pero solo por fuera, y arriba me has demostrado que eres debil o tengo que recordarte como suplicabas- le dije sonriendo coquetamente, a continuacion pase mis manos por detras de su nuca y junte mis labios a los suyos- y lo peor de todo, acabas de decirme que te estas enamorando de mi, si es cierto, es un defecto...pero para mi es tu mejor defecto...-le dije volviendo a juntar nuestros labios, despues separo sus labios de los mios y apoyo su frente contra la mia
-En cambio yo soy perfecta- le dije en broma bostezando y cerrando un momento mis ojos, estaba agotada.

Ella se levantó y vino hacia mí al momento, se lo agradecía, me había costado mucho soltarle todo aquello y necesitaba saber su reacción.
-pues claro que tienes defectos,eres un chulo, pero solo por fuera, y arriba me has demostrado que eres debil o tengo que recordarte como suplicabas- me hizo bastante gracia recordar ahora cómo me había puesto hacía sólo un rato, solté una carcajada y ella me besó- y lo peor de todo, acabas de decirme que te estas enamorando de mi, si es cierto, es un defecto...pero para mi es tu mejor defecto...-me volvió a besar y yo la aparté un poco para poner mi cabeza junto a la suya, no quería que malinterpretara el ansia con el que la estaba besando.-En cambio yo soy perfecta- y a continuación abrió la boca en un gigantesco bostezo y entornando sus ojazos negros.-

La cogí entre mis brazos y me encaminé a las escaleras, se acurrucó en mi pecho y para mí que se empezaba a dormir.La puerta de su cuarto estaba abierta, me acerqué a la cama, estiré con una mano como pude las sábanas mientras con el otro brazo la seguía sujetando dejando sus pies sobre el suelo, la acosté muy despacio, tenía los ojos cerrados.Parecía una noche fría aunque su cuerpo estaba calentito, el mío en cambio no lo estaba tanto, así que me dirigí al armario y busqué algo para cubrirla, no quería que se enfriara.
Encontré una manta a rayas que parecía bastante gruesa, la cogí y la eché sobre su perfecto cuerpo. Yo también me encontraba bastante agotado, mental y físicamente, así que me quité los pantalones y la camiseta y me acosté junto a ella, acurrucándome un poco sin molestarla demasiado para que no despertara, se la veía feliz y me hacía feliz a mí también.
Y así poco a poco fuí entrando en un profundo sueño, al amparo del calor que me producía el cuerpo de Is.

Cuando abrí los ojos lo primero que vi fue a Jim, estaba a mi lado completamente dormido, respiraba placidamente y se notaba que descansaba. Me acerque lentamente para mirarle la cara y ver que de verdad dormía, cierto.
Destape un poco la manta que tenia encima y le mire la espalda, seria mejor que le curara un poco los arañazos, no se le fueran a infectar o algo...
Me levante de la cama haciendo el menor ruido posible y fui al baño, aquella parte de la casa también estaba patas arriba, recogí las llaves de su casa del suelo y las deje junto a su ropa doblada, encima de la cama, al otro lado del que estaba Jim durmiendo.
Busque algo de ropa para ponerme y me fui a la ducha, mientras me secaba el cuerpo, pensé como era posible tener la piel tan caliente, realmente parecía que tuviera fiebre pero yo me encontraba genial. Me peine, dejando el pelo mojado reposar sobre mis hombros y espalda y rebusque un botiquín o algo así. Salí del baño y me metí en la habitación a esperar que Jim se despertara, mientras ordenaba mi armario colocando toda mi ropa que todavía estaba en las maletas.

Estaba tan cansado que me costó mucho abrir los ojos, me estiré un poco en la cama y busqué con mi mano el cuerpo de Is, pero ella no estaba a mi lado, no sabía qué hora era, ni cuanto llevaba durmiendo.Abrí los ojos muy despacio pues el reflejo de la débil luz que entraba por la ventana me molestaba aun.
Busqué a Is por la habitación y no estaba,al de un rato entró y cerré los ojos para hacerme el dormido, me gustaba verla sin que ella lo supiera.
Recogío mi ropa y la dobló cuidadosamente dejándola en el lado contrario de la cama que yo estaba, yo la miraba con un ojo entreabierto para que no se diera cuenta que estaba mirándola, se la veía tan cuidadosa para no despertarme...
Salió de nuevo de la habitación y al de un rato volvió con un bote de agua oxigenada y otro bote que parecía yodo, supongo que mis heridas estarían peor que ayer y querría reparar su ataque de furia.Lo dejó todo en la mesita contraria al lado que permanecía tumbado, pero no aguantaba más sin ella cerca de mí.
-¿Ha dormido bien la princesa?.-le dije en voz floja y sonriéndola

-¿Ha dormido bien la princesa?.-me dijo en voz bajita, cuando me gire vi que me sonreia, le devolvi la sonrisa y asenti con mi cabeza varias veces.
-Aunque no recuerdo como llegue a la cama- dije riendo un poco- y tu que tal has dormido?-pregunte mientras me acercaba a la cama, me sente en una esquina al lado de Jim .-Te parece bien que te cure los arañazos?- pregunte mirando con detenimiento los del pecho, esos casi no se veian ya, aunque los de la espalda si.

-Aunque no recuerdo como llegue a la cama..., ¿y tú que tal has dormido?-por su expresión divertida se debía acordar perfectamente de cómo llegó hasta la cama.
-A tu lado se duerme realmenete bien Is, tu cuerpo desprende un calor y un olor que hacen imposible no dormir bien cerca de tí.- le decía mientras me incorporaba despacio en la cama, me dolía bastante la espalda y solté un débil quejido.-
-¿Te parece bien que te cure los arañazos?.-me dijo mientras se sentaba junto a mí en la cama.-
- Veo que también ejerces de enfermera, eres una chica de lo más completo.-le dije riendo con ganas.- no vas a dejar de sorprenderme, ¿verdad?.-me acerqué a sus labios y le robé un beso.-
Me dí la vuelta poniéndome bocabajo para dejar que me curara, o lo que ella quisiera...

- Veo que también ejerces de enfermera, eres una chica de lo más completo. No vas a dejar de sorprenderme, ¿verdad?.- me dijo riendo y me dio un pequeño beso, después se tumbo boca a bajo para dejarme ver sus arañazos
-No sabes tu bien lo completa que soy...-dije murmurando y riendo, era completamente cierto, el no sabia ni la mitad y lo peor era que no podía contárselo, a el ni a nadie, era algo que me quemaba por dentro, tener que esconder tu mayor secreto rellenándolo todo con mentiras.
Cogi lo que había traído para curarle y me puse manos a la obra, de vez en cuando Jim se quejaba de algún arañazo
-Voy a tener que aprender a controlarme...-dije murmurando otra vez, y con eso me refería a todo, la noche anterior había estado a punto de explotar delante de Jim, aquello hubiera supuesto un desastre, era algo que jamás podría pasar...
-Ya esta!-dije animadamente mientras le daba un beso en el hombro, el se levanto a mirarse en el espejo-pero tienes que prometerme una cosa...no te quites la camiseta delante de tu madre...va a pensar que en este pueblo te maltratamos y querrá que volváis a Massachusetts...-dije haciendo un pucherito-y no quiero que te vayas...





(ala nai...ya puedes denunciarme por maltrato...tienes testigos como tu querias... )

(si me pone cachondo con tus jueguecitos nena, ouh yeah estoy bueno hasta malherido dios)

-No sabes tu bien lo completa que soy...-me susurraba mientras se colocaba encima de mí para poder curarme las heridas.-Voy a tener que aprender a controlarme...-me decía mientras me curaba delicadamente y entre risitas.-
El escozor que me provocaba el tacto del algodón empapado por mis heridas era casi insoportable, pero tenía que proteger mi imagen delante de ella, no era ningun blandito, así que intenté evadir mi mente a cualquier otro momento más placentero.Cómo no, al momento me vino la imagen de la noche pasada con ella, como la gozábamos juntos, lo cual hizo que me entraran unas ganas tremendas de hacerle el amor inmediatamente.
-Ya esta!,pero tienes que prometerme una cosa...no te quites la camiseta delante de tu madre...va a pensar que en este pueblo te maltratamos y querrá que volváis a Massachusetts...- su voz exaltada me hizo volver de mi ensoñación, pero las ganas de poseerla otra vez seguían ahí.
-Te lo prometo a cambio de que no me des la vuelta, dejes que se sequen las heridas un momento y me subas un vaso de leche con cereales por favor.-no quería que comprobara mi estado, así que intenté alejarla de mí en ese momento hasta que se me pasara y volviera cada cosa a su sitio.

-Vale!-le dije contenta y me fui a por el vaso de leche y cereales, baje a la cocina y mientras se calentaba la leche, acabe de ordenar la compra del dia anterior en los armarios, despues subi la leche con los cereales en una bandeja y un zumo para mi, entre en la habitacion y Jim estaba de espaldas a la puerta.
-¿te gusta la leche caliente?La he calentado un poco es que como no sabia...mira aqui tambien estan las galletas de ayer y hay brownis- me sente sobre la cama como los indios y deje la bandeja entre Jim y yo, el seguia de espaldas a mi.