Casa de Safira Lemacks

Safira Lemacks

No había nada que hacer en casa, y si lo había no me apetecía ponerme a trabajar otra vez, sería muy agotador y ya me molesta la erupción como para encima añadirle cansancio al tema. Bostecé, estaba claro que necesitaba dormir, depués de aquellas pesadillas tan vívidas como incoherentes necesitaba descansar. Y mira, de ese modo no me molestaría la erupción, es perfecto.
Así que me fui a la habitación y me tumbé en cama tapándome con una manta, deseando que esta vez pudiera dormir sin sueños sin sentido.

Llegue a la casa de Safira, todas las luces estaban apagadas, me parecio realmente raro, aun asi decidi llamar a la puerta, esperaba que no le pasara nada.

- ¡¿Safira?!- grite desde fuera, me estaba poniendo realmente nervioso.

Safira Lemacks

Me desperté del todo cuando oí golpes en la puerta, ¿es que no hay un timbre?
-Voy, voy-dije un voz ronca por el sueño-.
Abrí la ventana que daba a la calle y cual fue mi sorpresa al ver a Chad abajo, un poco nervioso.
-¿Chad?-me miró aliviado-. Espera, que ahora bajo.
Bajé corriendo las escaleras y cojiendo una bata de pasada, y antes de abrir la puerta me miré, cosa que no había hecho antes. ¡Oh no, que desastre! Con el cabello despeinado, solo un poco pero para mí ya era mucho, cara somnolienta y lo peor: ¡sin pantalones! ¿Cuándo me los quité si no lo recuerdo? Si subía en un momento y me los ponía...
Llamaron a la puerta de nuevo, aún más fuerte. Bueno da igual. Me puse la bata por encima quedando un hombro sin cubrir, le hice un nudo para que tapara todo lo posible y abrí la puerta.
-¡Qué sorpresa Chad1-sigo sin saber si debo o no saludarle con un beso o un abrazo-.

Suspire aliviado.

-¿Te he interrumpido?, lo siento si quieres me voy...no queria asustarte- ese hombro descubierto quedaba muy sexy, estaba despeinada y con cara de sueño pero la verdad esque estaba preciosa-. Solo queria...verte-le sonrei.

Safira Lemacks

Le respondí con otra sonrisa.
-No te preocupes, de todas formas tendría que haberme despertado antes. Es que no tuve una buena noche, una pesadilla muy confusa-le expliqué sin muchos detalles-. Pasa anda, no te quedes ahí parado como un idiota.
Le cogí del brazo y le llevé a la cocina, aunque más bien iba él solo porque estaba claro que no podría moverle ni un milímetro.
-Siéntate ahí quieres-le indiqué una silla-. ¿Quieres tomar algo: un café, un refresco...? Voy a ponerme un poco más... ya me ves. No tardo.
Subí y me puse los mismos pantalones de antes, creo que no se dio cuenta de que iba sin parte de abajo para mi suerte. Bajé aún con la bata puesta.
-No me has contestado si querías tomar algo.

-No me has dado tiempo- dije sonriendo- No, no quiero nada gracias, solo acabo de terminar las clases practicas y me apetecia verte. ¿De que iba tu sueño si puede saberse?, seria una pesadilla si no te dejo dormir, quiza pueda ayudarte a analizar el sueño...

Esperaba que el sueño tubiera que ver conmigo porque yo soñaba a diario con ella, joder que me estaba haciendo esta mujer...

Safira Lemacks

-Pues... esto...-en parte me apené porque contarle el sueño implicaba contarle también el accidente y en parte me sonrojé porque en el sueño aparecía él, y no hay nada más patético que soñar con un chico que no piensa en ti o no sueña contigo-. Te lo contaré Chad, pero antes tengo que contarte algo muy importante para que lo entiendas. Sin embargo tienes que prometerme unas cosas: que no se lo contarás a nadie porque lo que te voy a contar jamás se lo conté a nadie, ni siquiera a la policía, les mentí diciendo que no recordaba nada-se asustó según mi parecer-; que no te asustarás por nada que te cuente y que no pienses que estoy loca porque voy a parecerlo ahora, ¿entendido?-él asintió sin estar muy convencido-.
Cogí aire y me armé de valor por primera vez para contarlo:
-Audrey os contó que mis padres habían muerto, ¿no?-asintió-. Pero seguro que no os contó que fue hace dos, casi tres meses. O que fue en un accidente de coche y que yo estaba con ellos, que algo nos embistió, que cuando salimos del coche dos seres atacaron a mis padres-se me hizo un nudo en la garganta y empecé a llorar-, que pude ver sus caras de muertas horrorizadas, y lo mejor de todo: que me desmayé y que cuando desperté estaba cubierta de la sangre de mis padres, pero sus cuerpos no estaban, sólo sangre, rojo y blanco, rojo y blanco...-lloré aún más fuerte, hipando e hiperventilando, creí que me daba algo-. No se lo conté a la policía porque lo que yo vi no tenía senti: vi figuras humanas, pero... embistieron el coche y lo... lo sacaron de la carretera y... y...-cogí aire de nuevo-. En la pesadilla revivía eso, pero una de las criaturas me cogía y era el chico ese que dices que es peligroso, pero entonces aparecía en tus brazos y me decías que me alejara del frío-me sonrojé, pero la sensación se me pasó rñapido para dejar de nuevo paso al llanto-. Lo siento mucho, no tenía que habértelo contado, pero hacía tiempo que no tenía pesadillas de esas y entonces voy y tengo una y... no sé por qué te lo conté si no estaba preparada y total por na estupidez... -me encogí y bajé la voz-. Todavía me atormenta el no saber que fue lo que los mató. No lo entiendo, parecían humanos, pero muy rápidos y fuertes, y habría jurado ver unos ojos de tono vermellón, mezquinos y fríos... no lo entiendo, no lo entiendo, no lo entiendo-lloraba sin parar. Le vi entre las lágrimas-. oh, no sabes cuanto siento que me hayas visto así, si prefieres irte lo entenderé, de veras.

Escuche atento su relato y vi como se derrumbaba por momentos, cuando acabo no soporte verla asi y fui corriendo a abrazarla.

- No voy a ningun lado Safira...gracias por contarme esto.- seguia llorando, intentaba secarse las lagrimas pero no podia-. Llora cielo, llora, te hara bien, desahogate- asique habia estado a punto de morir en manos de los chupasangres, ahora si que no dejaria que se acercaran a ella y mucho menos ese al que habia conocido en el instituto, no podia permitir que Safira descubriera que lo que habia matado a sus padres era lo que ella llamaba "amigo". El sueño habia sido muy revelador, la suerte era que no lo entendiera-. Cielo...- levante su cara con mi mano y pegue mi frente a la suya-. Te juro que cuidare de ti, nada ni nadie te hara daño tranquila...- volvi a abrazarla.

Me separe de Safira inmediatamente al oir la puerta.

- Buenas noches señora, soy un amigo de Safira...me llamo Chad- dije con una sonrisa triste- vera esque yo tenia un perro al que Safira habia tomado mucho cariño y...-me alce de hombros con cara de pena- se murio esta mañana, lo ha atropellado un coche- me frote la parte de arriba de la nariz creando hambiente de dolor-. Era un perro estupendo...y al contarle a ella lo sucedido se le han saltado las lagrimas...

Safira Lemacks
(casi me fastidias el tochaco pi ¬¬
Parad de postear!!!)

Le abracé con todas mis fuerzas. Me sentía tan cómoda a su lado, como si supiera que podría protejerme de cualquier cosa en este mundo, era increíble.
-Gracias a ti Chad, eres un cielo, un amor-le di un inocente beso en la mejilla y apoyé mi cabeza en su hombro-. Por favor no se lo cuentes a nadie, quiero tener fuerzas y valor para poder contarlo yo, me prometí ser fuerte. Pero no lo soy, ¿sabes? Estuve un mes aquí metida en shock porque no era capaz de salir a la calle. En un sólo mes...-lloré de nuevo-. en un sólo mes todo se hizo nuevo: estoy en un país en el que nunca había estado, viviendo con una tía que apenas conozco y yendo a un instituto con gente a la no he visto en mi vida. Muchas veces quiero irme a mi casa, con mis viejos amigos y hacer lo que hacía: salir, escribir poesías alegres y patinar, echo mucho de menos patinar-me serené y le miré a los ojos-. No sé, pero me es fácil contarte todo esto a ti, eres el primero al que se lo cuento. Y ahora, me siento mucho mejor-le di otro beso-. Hay una cosa que quiero saber: ¿por qué dices que no me acerque a los de piel fría? Tienen una enfermedad o algo... a mi el frío de la piel no me molesta: es más, me es agradable.
Había pensado en contarle mis investigaciones sobre vampiros, pero no quería que me tomara por una chiflada obsesionada con las historias de miedo.
En ese momento entró mi tía en casa.
- ¡Safira! Cielo, ya estoy en casa. ¿Qué tal el día? ¿Qué pasa? ¿Por qué estás llorando? ¿Quién es? - Preguntó sobresaltada la tía de Safira al ver la situación.
Chad le contó una trola tremenda.
-Si, pobrecillo Kas, me encantaba ese perro-aproveché las lágrimas que aún tenía para secármelas con aire triste-.

Safira Lemacks y Chad Michael Murray
(Fastidiaré todo lo que pueda y algo más )

- Siento lo de tu perro - dijo secamente a Chad - ¡Safira! ¿y esa erupción? ¡Estás fatal de la alergia! ¿Dónde has estado hoy para ponerte así? ¿o a dónde te ha llevado este chico? No me gusta nada como están esas pústulas...

Safira Lemacks
(Grrr )

-No, es que he estado limpiando el polvo de mi habitación, y al limpiar debajo de la cama me ha venido a la cara una cantidad tremenda de polvo. Pero ya me he tomado el antihistamínico y ya estoy mejor.
No quería que nadie supiera lo de mis absurdas investigaciones sobre vampiros.
-Tía Helen, no o trates así, Chad es muy buen amigo mío-o algo por el estilo. Me acerqué al oído de tía Helen-. No parecías tan ofuscada cuando te conté lo de Hayden-me separé y me acerqué a Chad-. Chad es uno de los que fueron conmigo a la playa.

Safira Lemacks

Agarré del brazo a Chad.
-Ya he descansado antes, así que Chad se queda porque estábamos hablando tranquilamente. Luego te cuento el tema del polvo y la alergia-dije más seria que antes-.

(vale ya me abeis jodido 3 post, pero no pasa nada...vosotras seguid si eso...)

- No quiero causar problemas...Safira si tu tia quiere que me valla me voy no te preocupes...no pasa nada...-joder con la tia, me estaban entrando ganas de descuartizarla...esto era un chupasangres humano dioooos...

Safira Lemacks

No iba a estar sola de nuevo, ya dormí bastante.
-Mejor aún, salgo a dar una vuelta con MI AMIGO, hasta luego. Luego hablamos tía Helen
mE quité la bata, me puse lo zapatos, me peiné con las manos, cogí las llaves y salimos de la casa.
-Oye lo siento eh... no suele ser tan antipática.

-No...tranquila, es normal, meti la pata, la proxima vez tendremos mas cuidado. Vamos a dar una vuelta anda...¿de que estabamos hablando?, con todo lo de mi pobre perro se me ha olvidado- dije riendo.

Safira Lemacks

Reí con él.
-Te decía que todo es nuevo para mí aquí, que no conozco nada, que echo mucho de menos patinar y que porqué no debo acercarme a los de piel fría, si el frío no me molesta y me gusta. ¿Es una enfermedad que tienen?
¿Se estaba haciendo el tonto o es cosa mía?

- Si, digamos que tienen una enfermedad y es contagiosa, por eso no me gustaria que te acercases a ese tio...Hayden, puede ser peligroso para tu salud y no quiero que te pase nada. Y no te preocupes, estamos empezando a ser un grupo de amigos cielo, sabes que no estas sola y me conoces a mi...puede que en Port Angeles haya alguna pista de patinaje, un dia de estos iremos a investigar ¿quieres?- seguimos caminando sin saber a donde ir, simplemente andando.

Safira Lemacks

-Entonces es eso, seguro que no es por otro motivo como la... envidia-dije indeferente-. ¡Eso del patinaje sería estupendo! Ojala hubiera una pista-se me iluminaron los ojos como cuando era pequeña, él rió y seguimos andando-. Oye, ¿qué te pasó el otro día en la playa? Hblaste con Kitty y de repente estabas muy serio y te marchaste.

-Bueno, puede que si, que haya un poco de envidia como tu dices pero eso lo soluciono rapido...-pare en seco, la atraje junto a mi y la bese suavemente, de forma que nuestros labios casi no se tocaran- En cuanto a lo de la pista...puede que alla una, ya lo veremos...-pregunto porque me marche, haber que le decia yo ahora...- pues veras, digamos que teniamos opiniones muy diferentes en un mismo tema y nos enfadamos un poco, solo eso...

Safira Lemacks

Hum, le notaba algo más distante que de costumbre.
-¿Sólo eso? Bueno está bien, si no quieres darme más explicaciones no tienes porque, no me molesta-sonreí e intenté besarle en la comisura del labio, pero no le llegaba a la cabeza y él tuvo a agacharse un poco-. ¡Eres demasiado alto! Pareces un gigante-reímos los dos-. Ni que tomaras vitaminas...