Casa de Audrey Owen

- ¡No puede ser! si acabo de acostarme.- abrí mi móvil y ví que efectivamente era jueves.- ¿esto es una pesadilla? ¡deberías haberme llamado!.-dije bastante enfadada.- había quedado con Is y ni siquiera la avisé para decirle que no iba, ¿qué pensará de mí ahroa mi mejor amiga? no me apetece hablar contigo, sal de mi cuarto por favor, me arreglaré y bajaré en un momento para ir al instituto, tampoco me pienso sentarme al desayuno con vosotros, así que podeis empezar sin mí.

- ¡No te excuses! para mí era importante haber ido, encima he quedado mal delante de mi amiga, a saber que piensa de mí que ni siquiera avisé que no iría. Si tanto te preocupa mi descanso tenías que saber que después de cenar en casa de Is pensaba dormir toda la noche, no hacía falta pasarme un día entero durmiendo aquí, ahora por favor te pido que me dejes sola, tengo que prepararme, de aquí saldré para ir al instituto.

- Déjalo estar papi.-dije mas serena.- me he enfadado un poquito pero sabes que contigo soy incapaz de estar mucho tiempo de malas, ¡te quiero tanto papito mío! pero para otra vez despiertame porfi, para mí estar con mis amigas es importante, para una vez que tengo una mejor amiga no quiero fastidiar la cosa jo, anda, espérame abajo que tengo muuuuucha hambre, ¿hay tortitas con sirope? dime que sí porfi porfi

- Sí papi, estaré bien, pero intenta que no me agobie mucho porfitas, ya sabes que se me pone algo pesada y hoy tengo el humor variable, así que échale un cable a tu bizcochito.
Mi padre asintió echándome una sonrisa cómplice y cerró mi puerta. Me metí al baño y me duché con tranquilidad, me arreglé el pelo casi en un momento y me eché un poco de brillo de labios que los notaba un poco cortados, me vestí como a mi me gustaba, hoy me iba a dar igual que me miraran raro o me dijeran que era una pija, estaba de mal humor y pobre del que se le ocurriera meterse conmigo, además, me encontraba cómoda vistiendo así. Terminé y bajé a la mesa con mis papás.
- Buenos días papi, mami, mmm que rico todo, gracias por prepararme el desayuno mami, tengo mucha hambre, jo, siempre piensas en mí, cómo te quiero, ¡eres la mejor madre del mundo mundial!

Audrey Owen
(Eso sonó a mucho peloteo pa ir dirigido a tu madre! )

- ¡Me alegro de que te guste cielo! Te encuentras bien, ¿verdad? Desde luego tienes una cara estupenda... - dijo tu madre a modo de saludo - Hay tortitas, creps, tostadas, zumos, mermeladas... ¡Coge todo lo que quieras! - Mientras tu madre decía todo esto, viste como tu padre te guiñaba un ojo...

(Estoy con depresión, así que me estoy más sensible de la cuenta )

- Estoy perfectamente, ya me ves, pero si quiero seguir igual de estupenda no creo que ponerme a comer tanto me ayude, ¡acabaré con mi maravillosa silueta! aunque no creo que un poco de esto.- dije mientras cogía unos creps en el plato y les echaba sirope de chocolate.- me haga daño jijijij. -tenía que acabar con esta ansiedad, leí que el chocolate iba bien.- ¿papi me llevas al insti verdad?

Cogí la carta, que raro que alguien me escribiera a mí, supuse que sería del juzgado, recordé que me dijo el juez que si había algun problema me mandarían una carta, mis manos empezaron a temblar mientras sostenía aquella carta.

-Síííí ¡¡¡¡toma y toma!!!! papi, mami, me han absuelto de todos los cargos ¿no es genial? ya no tengo de qué preocuparme, tenía tanto miedo y lo pasé tan mal jolines...me dejaréis quedar con mis amigos para celebrarlo ¿a qué sí? ¡porfi porfi decid que sí!.-hice una pausa para analizar el rostro de mis padres, estaban felices por aquella noticia, ellos también andaban preocupados.- bueno antes de nada, aquí dice que en 15 días tengo que ir a firmar la declaración, pero es un momentillo, puedo ir hasta yo sola alguna tarde.

- Uy no he pensado nada aun, teneis que dejarme hablar con mis amigos primero, al no tener coche no sé si podremos ir a Port Ángeles, por que en casa estando vosotros como que no, que conozco a mamá y se pasaría el rato interrogando a mis amigos y por ahí en medio, aunque también estaría bien en casa de algun amigo o en algun bar de por aquí, ¿me dejais que lo hable y os digo cuando sepa?
Mi padre no se enteraba de la historia definitivamente, ¿fiesta en casa? si mis padres asistieran a una de mis fiestas acabarían en el hospital con una angina de pecho, pero tenía que seguir siendo su niñita para hacer con ellos lo que quería como hasta ahora, tenía que ver a Is en el instituto, cuantos más vinieran a la fiesta más salvaje sería, empecé a planear mentalmente mi super fiesta, tendría que hacer historia.

-Papi es que no me ves que estoy lista jo.-dije señalandome.- anda papaito yo siempre estoy lista, así que cuando quieras me llevas, además si llego un poquito antes quiza pueda ir a mirar si está ya el equipo de animadoras para apuntarme.-hice una pausa y me dirigí a mi madre.- mami te crees que en este pueblucho no tienen equipo de animadoras, puf menos mal que llegamos nosotras para darle clase y glamour al pueblo jijijijij.

-Os llamé por teléfono jo, que ya no tengo seis años papá, no podéis pretender que esté en casa viendo la tele con vosotros, estuve en casa de Is, fuimos a la playa a la tarde y luego cenamos, hicimos algo de deberes vimos la tele y a dormir, si eso es teneros preocupados...-mi padre me miró con cara de no creerse nada.- ¿no me crees? puedes llamar a Is y preguntarle, tú piensas que estuve con Nathan ¿verdad? para tu información no lo ví desde que salí del instituto, y encima Is vive en la otra punta como para que el pobre vaya en bici a su casa, y sí, sigo siendo virgen si es eso lo que te preocupa, no puedo creerme que pienses que Nathan y yo hacemos esas cosas, de verdad papá cada día me sorprendes más...

-Papi guapo echáme una mano con mamá como siempre, aunque no me importa que me castigue este fin de semana, quizá me venga bien para repasar un poco los deberes, pero es que si se pone demasiado pesada sabes que me agobia y luego se pasa el día detrás de mí jo,-le sonreí al parar el coche y corrí hacia él mientras salía para abrazarle entrando en casa juntos.-siempre seré tu niña papi, por mucho que haga o deje de hacer, te quiero.-le dí un beso y entramos en casa.-
¿Qué estaba pasándole a papá? siempre se creía todo lo que le contaba, tendría que estar más viva si quería seguir disfrutando de ciertos privilegios.
-¡Hola mami! ya estamos aquí, te he echado mucho de menos, ¿me das un besito?.-dije a mi madre con carita de pena.-

-Me has dañado mami, yo no estoy echada a perder, tuve un lapsus vale, estaba con Is haciendo cosas de chicas, le corté el pelo, nos hicimos unas mascarillas, nos pintamos las uñas...todas esas cosas que nos gustan, ¡am y estuvimos probándonos todo su armario! mira que camiseta me prestó.-dije quitándome la chaqueta y mostrándole la camiseta.- ¿recuerdas? ¡sí! ¡¡¡es aquella tan fántastica de esta pasada primavera que no encontramos por ninguna tienda!!! ¿me perdonas mami? te he fallado, lo siento, por cierto, huele genial la comida, como siempre