Bar´s Bar

Nathaniel Miller

Cuando entre vi a mi jefe con dos policias. La verja estaba bajada hasta la mitad asi que con un poco de suerte no tendria que trabajar esa tarde y podria irme a casa a preparar las cosas.
- Ey jefe - salude acercandome a ellos y espere a ver que pasaba.

jooooo....Forks ya no es lo mismo si hay mas de un bar xD mierda el dinero...hahaha da igual, me muero del hambre si me falta pasta algun dia de estos xD

Siempre el mismo recorrido hacia el bar, 200 pasos hacia delante, 25 a la izquierda y para terminar giro de noventa grados para subir el escalon y abrir la puerta del establecimiento. Acto seguido, una vez dentro, me dirigo a la mesa situada a la derecha del todo junto a la venta y asi poder observar siempre a la misma gente de dentro y de fuera.
- ¡Hola! ¿Qué vas a tomar esta semana?- Me pregunta el camarero. El de siempre.
- Veamos...creo que hoy sera pasta a la carbonara para cambiar un poco mas un vaso de agua.- conteste sin mirar la carta.

Dustin Milligan
(Vale, yo sólo avisé, y recuerda llevar las cuentas en tu página de pj... xD)

- En seguida te lo traigo, ya sabes - dice mientras se aleja con la nota. Todo estaba igual que siempre, la monotonía del pueblo era inalterable, pero... Hoy notabas algo raro, todo estaba igual, pero algo no encajaba, no sabías bien que podría ser, pero era como si algo estuviera fuera de lugar...

puedo llamar al camarero Andrew?? ^^

Mientras contestaba a la pregunta saque el dinero del bolsillo para poder pagar.
-Si, si...como siempre la comida ha sido exquisita Andrew. No me pasa nada...es solo que ultimamente fantaseo demasiado con salir del pueblo.- Intente sonreir con mi mejor sonrisa para aparentar buena cara y sali por la puerta sin direccion alguna.

Dustin Milligan
(Puedes, no hay problema)

Al salir a la calle, la apatía vuelve a invadirte, todo sigue como siempre. Las calles son las mismas. Han cambiado algunos establecimientos, pero en el fondo todo sigue igual: el mismo estilo de gente, las mismas rutinas... Casi no había gente paseando, por ser todavía la hora de comer, era la hora en la que podrías hacer casi cualquier cosa sin que nadie se enterase...

Dustin Milligan

Sali a la fria calle completamnete desierta por la hora que era y aunque no fuera la hora de comer tampoco se llenaria mucho, Forks practicamente era un pueblo apunto de morir. Era el momento perfecto para hacer algo gordo a la policia sin que nadie me viera, una manera de matar el tiempo. Me dirigi a la comisaria pensando en que hacer, tal vez una pinchada de ruedas, una desconexion de motores, alguna llamada de emergencia... ya se veria en el lugar de llegada.

Dustin Millgan

Llegue a la comisaria ensimismado en mis pensamientos sin prestarle atencion a nadie ni nada cuando paso un coche llamando mi atencion.
- ¡Chico! ¿Podrías hacerme un favor? - grito una voz procedente del coche. ¡Mierda!, ¿que hacia un coche aqui a estas horcacion posibleas?. Resignado completamente de mis planes me acerque al coche a regańadientes.
- ¿Que puedo hacer por usted...? - pregunte con toda la educacion posible.

Dustin Milligan

- No hay molestia alguna.- Conteste algo mas amable. - ¿Que es lo que busca? vivo aqui toda mi vida...me conozco este pueblo al completo.

Dustin Milligan

¡Oh vamos! ¿que le pasaba a este mundo? Un hombre con familia y engańandola de esta manera...para esto la gente no se casa.
Un momento, esto era la situacion perfecta para liarla un poco, una bromita de nada. Estaria bien mostrarle el camino de la casa del pastor de la iglesia de Forks, el le guiaria en el buen camino para echar las canas al aire, ha,ha,ha.
- Oh! de esto se trataba...- conteste animado. -Claro que le puedo ayudar. Mire, tiene que dirigirse toda esta calle abajo y en la rotonda girar a la derecha, mas adelante encontrara una casa blanca, de muy buen aspecto...parece la casa del pastor, pero no lo es, es tan solo un disfraz. - Pause con la esperanza de que el hombre siguiera mis indicaciones. - Le aseguro que le atenderan bien...lo se por propia experiencia.- Le anime guińaldole un ojo.

Dustin Milligan

Oh, claro que iba a subir al coche, y si no me llevaba el me las arreglaria corriendo para llegar alli.
- Vaya, es usted muy amable.- Abri la puerta del coche y me subi en el asiento de copiloto. - Me vendra muy bien un poco de relax.